Mensaje de María Rosa de la Paz en 6 de abril de 2016

MENSAJE DIARIO DE MARÍA, ROSA DE LA PAZ TRANSMITIDO EN LA CIUDAD DE FLORIANÓPOLIS,

SANTA CATARINA, BRASIL, AL VIDENTE FRAY ELÍAS DEL SAGRADO CORAZÓN

Queridos hijos:

La Campaña Juvenil por la Paz espera abrazar, como propuesta evolutiva, a todos los jóvenes del Brasil y del mundo para que se sientan motivados a servir en pro de la humanidad y por el fin de la guerra.

Es por eso que la campaña juvenil por la paz, que estará amparada por la Asociación María, intentará responder a la demanda de los más jóvenes, los que necesitan renovar sus vidas y sus hábitos a través del servicio, de la caridad y del bien.

En este momento los jóvenes de Florianópolis están siendo llamados a difundir y a ampliar la obra de la Madre Celeste. Así, a través de la Campaña Juvenil por la Paz, los más jóvenes tendrán um espacio para poder expresar sus momentos de oración, de servicio y también el arte y la música como medios de elevación y de creatividad espiritual, basándose en el respeto mutuo, la fraternidade y la unión dentro del mismo propósito de paz.

Para eso, la Asociación María deberá ser el medio que motive e impulse la búsqueda de una vida ordenada, pacífica, de servicio y de oración por el planeta.

A través del arte se buscará expresar la belleza interior de cada alma y, la oración y la manifestación de la música serán un punto de encuentro y de paz con la humanidad.

La Campaña Juvenil por la Paz tendrá su propio portal y al mismo tiempo será difusora de los encuentros de oración para los jóvenes, y también de todos los momentos de servicio y de caridade hacia los semejantes.

Esta campaña debe aspirar a vivir como base la importancia y la urgencia de tener paz en estos tiempos y de irradiarla al mundo entero, para que así triunfe el Inmaculado Corazón.

Esta misión tiene la propuesta de ayudar a los jóvenes a reencontrar un sentido espiritual para sus vidas y su entorno habitual.

¡Les agradezco por responder a Mi llamado!

En Campaña de paz y de salvación,

Vuestra Madre María, Rosa de la Paz

Ir arriba